13 de junio de 2015

Nos encontrarán.

Nos encontrarán siendo parte del lienzo que el sol besa, faltándonos piel que reciba toda su pintura. Nos encontrarán descosidos, retales de una tela que retó al aire y ganó el viento. Zapatos rotos, párpados de piedra, vacío el acordeón de las costillas. Nos encontrarán y no podrán decir que fracasamos. Perdimos, sí, pero el intento quedará grabado en la firma de las zarzamoras en nuestros muslos. Nos encontrarán quietos, es decir, tarde. No sabrán dónde termina la tierra y dónde empieza la carne, allí donde perdimos la verticalidad por el cansancio de la huida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario